La venganza de los orcos

Hace mucho tiempo, en Dambil, nació Hans, un elfo de la tribu Trishandler. Hans vivía con sus padres, Robert y Mary en una pequeña casa. El elfo vivía muy feliz, pero toda esa alegría se acabó un día.

Cuando Hans cumplió 7 años, sus padres lo mandaron a un hospital mental porque decían que hablaba “solo”, buenos, según el elfo, con unos seres minúsculos vestidos de verde. Hans estuvo 8 años metido en una celda fría y oscura sin tener nadie con el que hablar.

Al pasar esos 8 años, el elfo, se escapó de allí y se escondió en el Bosque Sombrío, sin familia, sin hogar y solo, terriblemente solo.

Hans estuvo viviendo en el Bosque Sombrío muchísimos años, pero ya no siguió siendo el mismo. Sus ojos se adaptaron a la oscuridad y se volvieron grandes y rojizos. Su boca se llenó de unos afilados dientes para poder arrancar la carne de los animales y comérsela. Sus orejas se volvieron grandes y puntiagudas, y se llenó de cicatrices al igual que todo su cuerpo. Así se formó una nueva especie, Los Orcos.

Se llamaban Orcos debido a que venía del idioma secreto elfo, Orcus Masticulus Tandes Ofes Sanges, que en nuestro idioma se diría Origen Raro Con Ojos Sangrientos. El nuevo ser se rebautizó como Skull o Vunet, que significaba Venganza.

Un día, mientras Skull buscaba alimento se encontró a un ser minúsculo y alado ¡Era un duende!

Por culpa de aquellos seres el elfo había pasado los peores años de su vida encerrado en una habitación sin poder salir nunca. Pero el orco no dejó que se escapase, y cogió al duende y se lo llevó a su cueva. Allí lo metió en una jaula y el pequeño ser fue sometido a varias torturas, hasta que el duende se convirtió en un orco. De ese modo, Vunet creó un ejército de los suyos para vengarse de todos los humanos. El orco iba pueblo tras pueblo matando. Sangre y frialdad fue lo único que quedó en Dambil.

Pero un nuevo contrincante se alzó. Eran  un equipo de cinco, y se hacían llamar la orden de la Verdad, lo formaban:

Los gemelos César, Guerreros de la Brisa.

Celia, valiente y fuerte luchadora de los Guerreros Andantes.

Ana, Guardiana de la biblioteca y Guerrera Dívera.

Y Titón humano-mago y aprendiz de Guerrero flamígero.

Los 5 se alzaron y lucharon contra el orco. Los guerreros, con magia, disparaban mientras que al orco derrotaban. Y el último golpe, de uno de los gemelos, acabó con la existencia del orco. El bien triunfó de nuevo y los orcos se volvieron buenos porque el encantamiento de Skull desapareció. Ya nunca habría más guerra. Bueno, en realidad…

Por César Nieto Ocaña