Una gran explicación

Mamá me gustaría dedicarte esta historia por todo el trabajo que haces y además te lo mereces. Me gustaría agradecerte toda tu dedicación. Espero que te guste esta historia.

Los tímidos rayos de luz entraban por la ventana. Todavía eran las 7:00 de la mañana cuando de repente se oyó algo:

-¡¡Mamá!!Tengo hambre y quiero desayunar-dijo Shy.

Shy era una niña despierta, es decir, era muy espabilada .Tenía los ojos claros y azules como el cielo en un pleno día de verano. Era una joven humana de 14 años. La muchacha era muy amable con todas las personas que conocía.

Después, estaban bajando por las escaleras su hermano, su madre y su padre. Todos se sentaron en la mesa para comer.

-Tony ¿Cómo has dormido hoy?-preguntó su madre.

-Bien, mamá.

Hoy para desayunar había huevos revueltos.

Al terminar, la madre les dijo que fueran a leer. Pero antes de leer, Shy tenía una duda.

-Mamá ¿Qué son los duendes?

-Te lo voy a contar, pero antes llama a tu hermano para que escuche él también.

-¡¡Tooonnnnnyyyyy!!Ven a escuchar el origen de los duendes.

-Espera un poquillo.

Cuando Tony llego su madre comenzó:

Bueno, os voy a contar qué son los duendes. Son unos personajes que nacen cada vez que se cae un pétalo de flor. Pero no de cualquier flor, solo de una que nace en una montaña llamada El Desgarro. Estos seres son normalmente pequeños; pero gracias a su pequeña altura son muy ágiles. Normalmente son amables y muy bondadosos. Sólo hay duendes de un tipo, los Eolirs; que tienen la capacidad de controlar el aire y crear tornados de mucho poder. Los duendes, durante su infancia van a una guardería para aprender a hablar y a dominar sus poderes. Ya que os he contado algo sobre los duendes, os voy a contar una historia sobre ellos.

Los niños estaban atentísimos cuando:

- Cariño ¿Quieres un café?

-¡¡¡¡¡Papááááááá!!!!!-gritaron los niños

-Vale, vale.

Su madre prosiguió.

La protagonista es Nam. Es una duende que vivió una gran aventura. Su madre la mandó a comprar. Durante el camino, se topó con una avispa. Como Nam tiene miedo a las avispas salió corriendo hasta que llegó a un lugar desconocido. La niña andaba sin saber adonde ir, cuando de repente vio a un duende:

-Hola, me llamo Nam y me he perdido. ¿Me puedes ayudar a volver a casa?

-Claro -contestó el duende-.

Cuando pasó una hora, se hizo de noche. Decidieron acampar allí y partir por la mañana.

Durante la noche, Nam oyó unos ruidos extraños. Cuando salieron a comprobar lo que era…¡¡Era un conejo enfurecido!! Sé que parece adorable pero es un conejo salvaje capaz de matar personas. El mayor se adelantó y luchó con el conejo. El joven salió con un arañazo pero no era nada. Ya era por la mañana y partieron rumbo a su casa.

Cuando llegaron su madre estaba preocupadísima por la desaparición de su hija:

-Mamá, lo siento no he hecho la compra.

-No pasa nada.

Fin. Con esa frase terminó la madre.

-Que guay -dijo Tony-.

-¡Qué chula! A partir de ahora leeré más para aprender más historias como estas.

-Pero bueno ¿Hay café o no?-preguntó el padre-.

 Por Alex Constantin